Es un proceso por medio del cual se debe propiciar el aprendizaje. Se precisa la aplicación de un método que haga uso constante en la actividad práctica, de la ayuda a los niños, que evite el dar órdenes y el surgimiento de la fatiga, por ello la familia ha de estar preparada para facilitar este proceso.
Crear habilidades, métodos y estilos en los niños para el ejercicio eficiente de la lectura y de la escritura es un elemento decisivo para que estos acaten con motivación estas actividades tan determinantes en su futuro trayecto por el camino del conocimiento.
Se deben emplear alternativas que hagan uso de sistemas de ejercicios, imágenes, diálogos, monólogos, técnicas, que hagan incursionar a los niños en distintas áreas del saber mediato al que se someterán garantizando en el futuro un buen aprendizaje. El buen ejercicio de la lecto-escritura en su tiempo y nivel es indudablemente la mejor contribución a la garantía de tránsito de un niño por le Educación Primaria.
La Educación de Jóvenes y Adultos puede contribuir a este acto por medio del asesoramiento a los padres que cursan estudios en los centros de esta Educación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario